Martes, jueves, domingo

Desayuno en el hotel. Por la mañana, se dirigirán hacia Jerash, ubicada aproximadamente a 30 km al norte de Ammán. A su llegada, podrán visitar las ruinas bien conservadas de la antigua ciudad romana de Gerasa, accesible a través de la monumental "Puerta Sur". Al entrar, caminarán por la antigua calle principal, el cardus maximus, también conocida como la Calle de las Columnas, flanqueada por 500 impresionantes columnas que conducen a la Plaza Ovalada. Entrarán en el teatro, escenario del Festival Anual de Jerash, donde podrán apreciar su maravillosa acústica, pasarán por el ninfeo y finalmente visitarán las iglesias bizantinas adornadas con suelos de mosaico. Tras completar la visita, continuarán el tour hacia Ajloun, donde podrán admirar dos de las atracciones ecológicas e históricas más importantes de Oriente Medio: los vastos bosques de pinos de la zona de Ajloun-Dibbine y el imponente Castillo Ayubí en Ajloun, que hace ocho siglos ayudó en la derrota de los cruzados. Los residentes locales a menudo aprovechan los paisajes verdes de Ajloun para tomar un descanso de la vida urbana e sumergirse en la naturaleza. Por la tarde, visitarán la espléndida capital de Jordania: Ammán, una ciudad de contrastes, una mezcla única de antiguo y moderno, ubicada en una colina entre el desierto y el fértil Valle del Jordán. Explorarán su centro histórico, conocido como Wasat al-Balad en árabe, comenzando desde la Ciudadela, donde podrán disfrutar de una de las vistas más hermosas de la ciudad con vistas a Jabal al-Qala’a. Luego, visitarán el Anfiteatro Romano y el Museo de Folklore. También tendrán la oportunidad de admirar el exterior de la Mezquita del Rey Abdullah. Cena y alojamiento.

Miércoles, Viernes, Lunes  

Después del desayuno en el hotel, partirán hacia Madaba. La ciudad es conocida por su prestigiosa colección de mosaicos, incluyendo el mapa más antiguo de Palestina conservado en la Iglesia de San Jorge, que data del año 560 d.C. Hoy en día, Madaba simboliza la convivencia y tolerancia entre diversas comunidades religiosas, albergando la mayor comunidad cristiana de Jordania. Luego visitarán el Monte Nebo, cercano y conocido como el lugar donde Dios mostró a Moisés la Tierra Prometida. Continuarán hacia Pequeña Petra atravesando la Vía de los Reyes, una antigua ruta comercial nabatea que conectaba Egipto a través del Sinaí con Aqaba, Damasco y el Éufrates en la actual Irak. Hoy en día, es considerada una de las rutas más panorámicas de Jordania. Pequeña Petra, el segundo sitio arqueológico más importante en Wadi Musa, es fácilmente accesible con un trayecto en coche de 15 minutos desde Petra y se puede visitar en menos de una hora. Por la tarde, llegarán a Wadi Musa, la ciudad moderna de Petra. Cena y alojamiento.

Jueves, Sábado, Martes

Desayuno en el hotel. Este tercer día del tour estará dedicado a la visita de Petra. Después de todo, ningún viaje a Jordania puede considerarse completo sin visitar la capital del antiguo Reino Nabateo, un lugar místico y glorioso, el tributo eterno de una civilización perdida. Petra fue descubierta en 1812 por un explorador suizo llamado Johannes Buckhardt que, disfrazado de árabe bajo el nombre de Sheikh Ibrahim, convenció a su guía beduina para que lo llevara a la ciudad perdida de la que tanto había oído hablar. Como punto de encuentro de la Ruta de las Especias nabatea, de caravanas que venían del Golfo Pérsico, Arabia occidental y el Mar Rojo, Petra, hace unos dos mil años, se convirtió en la capital del Imperio Nabateo. La ciudad era tan famosa que uno de sus reyes, Aretas IV, es incluso mencionado en la Biblia. La riqueza natural del área montañosa se combina de manera magnífica con la cultura refinada y la arquitectura imponente de esta tribu beduina, que esculpió sus teatros, templos, fachadas, tumbas y monasterios enteramente en las rocas de arenisca rosada. No es de extrañar, entonces, que la UNESCO haya incluido a Petra en su lista del Patrimonio de la Humanidad. Después de recorrer el Siq, aparece inesperadamente el monumento más famoso de Petra, fácilmente reconocible gracias a la escena final de la película "Indiana Jones y la última cruzada". ¡Pero el Tesoro no es más que el comienzo! Adentrándose en el sitio arqueológico, se le revelarán, una y otra vez, cientos de edificios tallados en la piedra y erosionados, a lo largo de los siglos, en fabulosas paredes multicolores. Cena y alojamiento en Wadi Rum, donde podrá disfrutar de una cena beduina tradicional "zarb" cocinada bajo tierra y admirar el cielo estrellado.

Viernes, Domingo, Miércoles

Desayuno en el campamento de tiendas. Wadi Rum es un desierto inusual: compuesto por montañas masivas de formas únicas que se elevan verticalmente desde la arena rosa, en un paisaje de belleza impresionante. Tendrás la oportunidad de realizar un tour en Jeep 4x4 de 2 horas para explorar los sitios más espectaculares de la zona. Al final del recorrido, se te ofrecerá una refrescante taza de té preparada por los beduinos. Traslado al Mar Muerto. Cena y alojamiento.

Sábado, lunes, miércoles

Desayuno en el hotel. El Mar Muerto es una maravilla natural situada a -430 m por debajo del nivel del mar. La principal atracción es su agua cálida, calmante y extremadamente salada, hasta diez veces más salada que el agua de mar y rica en sales de cloruro de magnesio, sodio, potasio, bromo y muchos otros. Sus aguas inusualmente cálidas y ricas en minerales han atraído a visitantes desde la antigüedad, incluidos el rey Herodes el Grande y la hermosa reina egipcia Cleopatra. Traslado a Ammán. Pasee por Rainbow Street, explorando las tiendas y lugares, y pruebe el delicioso falafel del famoso restaurante al-Quds. Finalmente, piérdase en las calles de la 'ciudad blanca', como comúnmente se conoce a Ammán, siguiendo el camino para descubrir los numerosos graffitis que la colorean. Cena y alojamiento.

Domingo, martes, jueves

Desayuno en el hotel. Traslado al Aeropuerto Internacional de Ammán para la salida.